El día después de los saleros: un ejemplo de comunicación simbólica de impacto y puesta en valor a través de mediador interno.
Es habitual que utilice en mis conferencias el símbolo como elemento que es capaz de sostener la atención de los participantes, al tiempo que provoca algún tipo de emoción y sobre el mismo vamos construyendo una comprensión clara de una idea o concepto importante: atención + emoción + comprensión, todo eso puede ser capaz de generar un sencillo objeto simbólico, siempre y cuando se presente de la forma oportuna, en el momento oportuno y relacionado oportunamente con el tema que nos atañe. Igualmente cierto es que un símbolo / objeto no presentado de la forma oportuna, y poco relacionado con el tema que nos ocupa, o metido con calzador, provoca justo el efecto contrario: pérdida de la atención del público y de la credibilidad profesional del ponente. Hace relativamente poco, en una conferencia sobre las 10 Claves para una Escuela Humanizadora en dos colegios de Escolapias de Logroño, en una de las claves, en concreto la de "Humanizar el currículo" me pareció oportuno p