El subtítulo del libro de este trabajo de reflexión personal desde una pedagogía social de la bondad, sitúa y enmarca el título en su intención: Manual práctico para transformar la bondad recibida en bondad compartida. Se trata, como la mayoría de mis publicaciones, de una propuesta no sólo reflexivo-teórica, sino y sobre todo, práctica, muy práctica. He apuntado alto en la intención del libro: un manual de cómo ser buenas personas, para entrenar en la propia vida, con ejercicios y retos muy originales.
He comentado que el subtítulo "enmarca" la intención del libro, pero ¿cuál es ese marco? Bien, se trata de un itinerario progresivo de 6 pasos que van desde la bondad recibida cuando venimos al mundo, a la bondad compartida cuando participamos en ese mundo haciendo el bien desde el contrato social. De los 30 ejercicios que propongo, el primero de ellos consiste en examinar la cuenta de nuestros ahorros de bondad recibida, y escribir los principales ingresos y anotaciones. Es como decirle a alguien: "mira, lo quieras o no, lo reconozcas o no, tú estás aquí gracias a la bondad que mucha gente ha depositado en ti". Y a partir de este reconocimiento, y agradecimiento, comienza todo, y también las primeras preguntas: ¿Qué hago con todo lo bueno que he recibido gratis, de forma generosa? Y el ejercicio número 30 es adquirir un compromiso de voluntariado por un año. Para llegar al mismo, hay todo un proceso de 29 pasos o retos para aplicar en la propia vida, desde un marco progresivo que tiene las siguientes 6 etapas (5 ejercicios por etapa):
1. Reconocer, valorar y agradecer la ayuda y el bien que hemos recibido.
2. Querernos y apreciarnos a nosotros mismos, en lo físico, mental y espiritual.
3. Reconocer y valorar lo que hemos hecho y estamos haciendo por ayudar a otros.
4. Planificar retos y tareas de ayuda concretas en nuestro círculo cercano.
5. Ampliar nuestros círculos de influencia generosa más allá de lo familiar-cercano.
6. Incorporar y asumir la generosidad como un compromiso y estilo de vida.
Todas las etapas son esenciales y necesarias para pasar a la etapa siguiente, para realmente andar una buena narrativa personal en torno a la bondad, para que esta dimensión y valor tan importante esté bien anclada en la experiencia personal. Si nos fijamos en la etapa 2, podemos preguntarnos: ¿Puede alguien que no se quiere y respeta a sí mismo, que no se aprecia y se ama a sí mismo, realmente amar bien a otros, ser bondadoso con otros? Las tradiciones espirituales nos dan la respuesta "ama al prójimo como a ti mismo".
La novedad de este itinerario pedagógico radica, sobre todo, en los tres primeros pasos, y aquí hago una reflexión cinematográfica con los episodios de la serie de películas Star Wars. El caso es que, durante muchos años pensamos y aceptamos que Star Wars tenía tres episodios, que en realidad dentro de la saga, estos tres episodios eran el 4, 5 y 6. Es decir, la historia comenzaba como sin raíces, sin un pasado y un anclaje previo, que se decía que estaba ahí, pero que no lo habíamos visto ni recorrido. Cuando fueron apareciendo los episodios 1, 2 y 3, comenzamos a comprender mejor la historia de los episodios 4, 5 y 6, y pudimos seguir avanzando en la misma en los episodios 7, 8 y 9.
Pues bien, con la educación en la solidaridad y en la generosidad, nos ha pasado un poco lo mismo: hemos comenzado, solemos comenzar, en el paso 4, que yo llamo “ponernos objetivos y tareas prosociales” y nos hemos saltado 3 pasos fundamentales de la historia y la narrativa de cada uno de los protagonistas del aprendizaje. De tal forma que proponemos directamente acciones prosociales, tenemos cierta prisa (yo también la he tenido) por visibilizar la acción prosocial, presentarla y comunicarla, porque si no, parece que no está sucediendo nada, que no estamos haciendo nada. Una historia de bondad y generosidad personal que se empieza a escribir sin vincularla al pasado, a la narrativa de cada cual (¿De dónde vengo, cómo he llegado a ser quien soy, quién me ha ayudado a mi, a quién he ayudado yo aún sin saberlo…?), es una historia que empieza incompleta y desanclada, líquida y flotante, sin referentes y raíces previas, como el episodio 4 de Star Wars, y que como tal, va a costar más que desarrolle buenas y sólidas raíces.
Es por ello que en este manual práctico para una vida buena, generosa y bondadosa, se combinan ejercicios y tareas prosociales de ayuda física, psíquica o social, con otros ejercicios menos conocidos y menos habituales en los programas formativos de la solidaridad y la prosocialidad (pero igualmente o incluso más necesarios) como el agradecimiento de la ayuda recibida por otros, el auto-cuidado y la autocompasión, necesarias para luego ayudar con más profundidad e intensidad a otros (amarse a uno mismo como al prójimo), o el reconocimiento y celebración de la ayuda, bondad y generosidad que hemos ofrecido y donado a otros en el pasado, sin haber sido muchas veces conscientes de ello (reconocer y descubrir que sí somos capaces de ayudar, de ser buenas personas).
El proyecto "Ser Buena Persona" es más amplio, no se queda sólo en el libro, el libro es un primer comienzo. Con la colaboración de FUNDERETICA (Fundación Europea para el Estudio y Reflexión Ética) y algunas entidades-empresas que se quieran sumar, vamos a desarrollar propuestas educativas, incluso digitales y gamificadas para llevar esta importante dimensión ética (el adjetivo "buena" es la clave, Ser Buena Persona es ser persona ética, que busca, hace y promueve el bien). Dado que la propuesta del libro va de retos y ejercicios cotidianos, ¿qué tal una app que movilice, dinamice y comparta la bondad cotidiana en tiempo real? ¿Suena artificial? Bueno, en realidad es muy real, y haremos lo posible porque lo sea.
César García-Rincón de Castro.